- Cada monitor del equipo comunal del covid realiza hasta 30 llamadas al día para contactar a las personas que contrajeron el virus.
Este verano ha sido complejo para Calama en cuanto al panorama covid. En enero se registraron 7.660 casos positivos mientras cambiaban las reglas del paciente considerado contacto estrecho por aquel en alerta de covid, incrementando la demanda de los test PCR. En febrero, si bien ha habido una disminución en los casos, el equipo comunal del covid continúa trabajando en el testeo, monitoreo y las visitas domiciliarias a los pacientes.
Pablo Monje es kinesiólogo y forma parte de este equipo desempeñando el rol de monitor covid de los casos positivos. Es decir, contacta a la gente para verificar sus condiciones de salud, les dice los días que deben hacer cuarentena y evalúa si requieren visita domiciliaria. Eso se va coordinando entre clínicos y administrativos que suman 35 personas que trabajan en la escuela Claudio Arrau.
Por estos días Pablo, al igual que los demás monitores covid, llama entre 20 y 30 personas al día para preguntarle por su estado de salud.
- ¿Cómo es, en la práctica, explicarle a la gente lo que deben hacer en su casa?
- Nosotros igual hemos desarrollado un criterio a lo largo del tiempo. La idea es que cuando llamas al paciente él quede con la información más clara posible; aclarar dudas como por ejemplo el inicio o término de síntomas. Por otro lado, también tener claro en qué condición se encuentra el esquema de vacunación del paciente.
- ¿Cómo está influyendo el estado de los esquemas de vacunación de las personas?
- Actualmente, la fecha de cuarentena para todo paciente positivo son siete días, pero antes del 20 de enero teníamos clasificaciones de 10 días para casos índices y contactos estrechos siete días, y todo dependía del esquema de vacunación. Entonces, hoy todavía nos encontramos con gente que no tiene el esquema de vacunación completo, principalmente extranjeros. Aún así, a todos se les da la información de las medidas preventivas, el autocuidado y la gestión de visita domiciliaria en el caso que corresponda según los síntomas.
- ¿Cómo está reaccionando la gente con ustedes, les tocan pacientes indignados por la situación?
- El manejo del paciente hoy en día no es lo mismo de antes. El paciente está más informado, tiene acceso a plataformas, la información en las noticias y todo medio de comunicación indica el colapso. Entonces, el paciente entiende cuando vas a llamarlo que hay un proceso de lentitud. Aún así, hay gente que tiene mayor irritabilidad, lo que es comprensible por la situación, pero tratamos de llevarlo de la mejor manera explicándole al paciente. Él nos escucha, él nos entiende. Hay casos en los que no nos quieren escuchar, pero al menos cumplimos con el objetivo de llamarlos que es lo importante.
Este avance de la vacunación, ha hecho que la sintomatología sea menor y haya una menor mortalidad. En consecuencia, la gente con su esquema de vacunación completo, tienen una mejor respuesta y evolución al contagiarse de covid-19.
Lo que preocupa son las personas sin vacunas, entre ellas –mayoritariamente- extranjeras, pero también chilenas. “Claro que cuando ya han sido positivos, han vivido la experiencia clínica del virus, toman otra perspectiva. O sea, ellos quieren vacunarse», dijo el monitor sobre el cambio de conducta que han tenido estas personas.